Por supuesto, parto de la base de que no siempre lo que se indicaba tanto en aquel post como en éste es cierto, las afirmaciones están exageradas, pero ¿hasta dónde son exageradas? Tampoco estoy hablando exclusivamente de mi experiencia personal, afortunadamente no me he visto en estas situaciones tan extremas en las empresas donde he venido desarrollando mi labor, pero, ¿quién no conoce casos así o los ha sufrido en sus propias carnes?
Por lo tanto, con las aclaraciones previas ya hechas, volvamos al asunto. ¿Qué trabajo se realiza en las consultorías informáticas al uso? La mayoría de veces, estas consultoras se nutren de dos tipos de fuentes principales:
- La cesión directa de personal tipo cárnica pura y dura.
- La realización de proyectos cerrados "llave en mano".
¿Qué interés tiene la cesión directa de personal? Para las consultoras mucho. Es dinero contante y sonante por tener a una persona en cliente. Más por menos, imposible. El cliente, consigue reducir costes de contratación y además, rebajar el posible sueldo de un empleado nuevo. Además, cualquier problema con el empleado no supone despido, sino hablar con la consultora para que lo cambien. Todo mucho más "higiénico". Así, asistimos a muchos clientes que, incluso siendo Administración Pública o similares, cuentan con "subcontratados" que realizan su labor durante años. Ahí lo que puede pasar es que si los demás curran poco, el curre algo, pero vamos, no demasiado.
Lo malo es si el cliente no es público, porque en crisis, los primeros ya sabemos quiénes son en caer: externos, becarios y temporales, por ese orden.
¿Relación del externalizado con el cliente? Lotería. Si tiene suerte, le tratarán bien. Si no, echará CVs porque, no nos engañemos, en su empresa matriz le tienen ahí en cliente para eso, para que esté allí quieto sin quejarse. Si el cliente decide un cambio, lo más posible es que acabe en la calle. Por lo tanto, y más en un contexto de crisis como el actual, o trabaja para el cliente o cambia de aires.
Además, estará en "tierra de nadie". En el cliente no es de la empresa, por lo que siempre será el último en disfrutar de beneficios, si es que le dejan catarlos. Y en su consultora, nadie le conocerá. Si recibe por email o correo las nóminas, ni los de RRHH. En la cena de navidad, no sabrá con quién hablar y todos se referirán a él como "el que está en XXX".
¿Puede un trabajo así realizar a una persona? Improbable. ¿Acercarse a trabajo basura? Probable.
En el siguiente artículo hablaremos de los proyectos "Llave en mano".
Para analizar las dos preguntas planteadas, sobre la posibilidad de innovación y el trabajo basura, yo partiría de una pregunta previa:
ResponderEliminar¿Que es una Consultoría Informática?, o mejor ¿en que consiste el trabajo de un Consultor Informático?.
La RAE define Consultor como "Persona experta en una materia sobre la que asesora profesionalmente."
Un poco ambiguo ¿no?
Aplicado a nuestro negocio, podriamos definir un consultor informático es aquel que (entre otros posibles escenarios) asesora profesionalmente sobre:
a) La estrategia en el uso de las TI... aquí podríamos hablar de los planes estratégicos, de sistemas o, a un nivel estratosférico, de los gurús / creadores de tendencias del mercado.
b) El uso de una tecnología específica para su uso en el desarrollo de TI. Una figura más conocida y reconocida por nosotros: nuestro tradicional cinturón negro, la maquina, el especialista en determinado entorno que resuelve aquello que al común de los mortales nos supera.
c) La mejor manera de solucionar un problema determinado aplicando las TI.
Este ultimo es el punto en el quería poner el foco en este comentario, y ver hasta que punto el personal de una Consultoría (tanto en régimen de cesión como participante en proyectos) puede encajar en este rol.
Yo haría una clara diferenciación (con independencia de lo que diga una marca comercial o una tarjeta de visita) entre las empresas / y las personas que se dedican a los servicios informáticos y las que practican la consultoría.
Los primeros se dedican a la digna tarea de hacer realidad lo que el usuario / cliente quiere.
Los segundos tienen como objetivo proponer (y convencer) al usuario / cliente como debe enfocarse el problema en cuestión.
Esta distinción no es trivial, puesto que resulta clave para determinar, por un lado el grado de valor añadido que aporta el profesional / la empresa, y por otro el grado de satisfacción que el profesional obtiene.
No se trata de una diferenciación "elitista", ni despectiva hacia unos u otros, simplemente del hecho de diferenciar la naturaleza del trabajo que cada profesional realiza.
Hay que aclarar que esta distinción no tiene que ver, tampoco, con la valía de cada profesional, sino que muchas veces viene determinado por el entorno: como es el cliente, como trabaja nuestra empresa, como se ha vendido el proyecto, y por tanto, que margen de maniobra tiene el profesional para hacer una cosa u otra. Es más, un mismo profesional puede desempeñar simultáneamente ambos roles en proyectos diferentes o, llegado el caso, en el mismo proyecto.
Una vez aclarado este punto, diría que el trabajo de consultor (el de verdad, no el que pone en la tarjeta o en la nomina), conlleva un componente de innovación, y difícilmente puede verse convertido en trabajo basura (salvo por el factor salarial ;-P), dado que resulta mucho más enriquecedor y satisfactorio.
Esta distinción, consultoría o servicios, determina también el carácter interno de una empresa, puesto que una empresa con esa vocación externa (o con muchos profesionales que la tengan) difícilmente podrá mantener mucho tiempo, sin reventar en mil pedazos, una línea inmovilista en su modo de hacer las cosas, puesto que se trata de algo que imprime un modo de pensar, una forma de actuar, un impulso casi compulsivo por cambiar las cosas, que hará que las propias dinámicas internas se vean afectadas por ese mismo tipo de impulso, por esa vocación de cambio.
Ahora la pregunta a plantearse es ¿somos consultores o profesionales de los servicios? ... ¿y que queremos ser?.
Un saludo
Hola Ricardo,
ResponderEliminarAnte todo, muchas gracias por tu comentario ya que resulta muy enriquecedor. Retomo el mismo por la pregunta final: ¿somos consultores o profesionales de los servicios? ... ¿y que queremos ser?
Dibujas en tu comentario un espacio muy atractivo en el que a todos nos gustaría movernos, no seré yo quien discuta nada de tu acertada exposición. Mi pregunta tiene que ver con las empresas que a sí mismas se hacen llamar "Consultorías informáticas" y que coloquialmente se conocen en el sector como "cárnicas". Porque si bien las empresas de servicios informáticos como las de consultoría, tienen ambas loables objetivos y cualidades, cuando uno rasca detras de la "tarjeta" de empresa consultora, ¿qué se encuentra en la mayoría de casos? A esos casos, que bajo mi pesimista punto de vista son mayoría, me estoy refiriendo.
Obviamente, se puede y se debe innovar en una empresa consultora que se precie, sea o no informática, pero, ¿se piensa hacer en estas denominadas "cárnicas"? Y en lo que se refiere a la cesión de personal, ¿se busca cumplir los objetivos de satisfacción del cliente o conseguir un rápido beneficio?
Mi pregunta va más por ahí.
Muchas gracias por tu aportación!!
Creo que las consultoras informáticas deberían prohibirse, así de claro. Yo trabajo en una, y jamás el cliente ma ha "consultado" a cerca de nada, trabajo para ellos sin estar contratado por ellos, eso es todo. Es una forma de escaqueo fiscal para las empresas, ni más ni menos, que además lleva a la precariedad laboral. Y entre ambas cosas: la evasión fiscal "tapada" y absoluta explotación en cuanto derechos, a horarios laborales y falta de poder adquisitivo de los ciudadanos de clase media, alguno de estos lumbreras del gobierno-troika esperan que nos creamos que quieren que la economía española se recupere? Me da la risa.
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